Todas nuestras limusinas cuentan con su propio permiso de transporte de alquiler con conductor (VTC).
Se trata de una autorización de arrendamiento de vehículos con conductor que es imprescindible para poder ejercer la actividad de alquiler de limusinas.
Los coches con tarjeta VTC deben llevar el siguiente distintivo visible en el parabrisas delantero.
Es muy importante contratar los servicios con una empresa que posea esta licencia para cada coche porque de lo contrario estaríamos utilizando un servicio ilegal que carece de los permisos necesarios.
Gracias a poseer estas licencias (es necesaria una licencia por vehículo) podemos circular por cualquier zona de Madrid ya que estamos dados de alta en el APR del ayuntamiento que permite transitar por zonas habilitadas para residentes o vehículos de servicio público.
La obtención de esta licencia por la Comunidad de Madrid acredita que tanto la empresa como el vehículo tiene todo en orden para poder ejercer la actividad de forma totalmente legal.
Contratar servicios ilegales de alquiler de limusina puede traer serios problemas legales. Anulaciones de servicio, retenciones del vehículo durante el servicio por parte de la policía, perdidas de cualquier tipo de garantía, etc.